En fila y de uno en uno, así acudirán a rendir pleitesía hasta siete organizaciones políticas (PP; PSOE; Vox, Sumar; UPN, CC y PNV) entre el lunes y el martes.
Que Franco pusiera en su día a la familia Borbón como futuros jefes de Estado usando su dedo por consejo de los poderes fácticos, y tuviera que ser incrustado sí o sí en la Constitución, no importa. La pleitesía de los políticos del régimen fue inmediata y todo apunta que piensan seguir practicándola, sea con el campechano, el preparado o su hija.
La monarquía como tal institución es absolutamente antagónica con la democracia. Es una obviedad que hay que repetir una y mil veces. Desde el poder y desde los gobiernos tratan de mirar para otro lado y aceptar el «esto es lo que hay», y con consignas desesperadas al percibir todo el país lo que era/es Juan Carlos de Borbón, «Felipe VI no es lo mismo», dicen, en una frase que traduce el hecho de que ni lo votó nadie ni falta que hace. La imagen repetida de los líderes y representantes políticos acudiendo a Zarzuela a explicar y ser explicados por alguien ilegítimo es causa de rebeldía.
Los republicanos de boquilla que acudan tendrán su minuto de gloria televisiva a cambio de olvidar la vergüenza en algún escaño.
Fuente: Insurgente
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